Las redes sociales han revolucionado como interactuamos con el mundo, y tienen aspectos muy positivos como mantenernos conectados con la gente que amamos y no tenemos cerca, pero nadie puede negar que también nos han traído grandes males como lo es la comparación excesiva.
Nadie puede negar haber sentido envidia o celos alguna vez al ver la vida de alguien más a través de su cuenta de Instagram o Facebook y darse cuenta que esa persona tiene todo lo que tú no tienes y crees necesitar para ser feliz. Todo pareciera indicar que esa o esas personas la tienen más fácil que tú: sus perfiles están llenos de viajes lujosos, tienen el cuerpo perfecto, una carrera exitosa, dinero, lujos que tú no puedes costear, amigos y familiares unidos ¡y hasta guapos! 😛
Pareciera que Satanás trajo a esas personas desde el mismísimo infierno para ponerlas justo ahí, enfrente de ti, con toda la intención de recordarte lo miserable que es tú vida en comparación ¿te ha pasado? ¿lo has sentido?
En lo que a mi respecta, ¿he sentido envidia? pffff ¡claroooo! soy humana y también tiendo a compararme, ¡muchas veces! muchas más veces de las que quisiera admitir.
Un consejo que escuché hace un tiempo fue “si sientes envidia por la vida de alguien que sigues en redes sociales, deja de torturarte y simplemente elimina a esa persona para que no la veas más”. Mmmm, lo digerí de momento y me pareció un movimiento acertado pero algo seguía sin hacer totalmente sentido ¿significaba que cada vez que sintiera envidia debía de eliminar gente en mi mundo virtual? ¿qué pasaría cuando sintiera envidia en mi mundo real? ¿me desharía de esas personas también?
Después de masticarlo por un tiempo me di cuenta que hacer esto puede funcionar pero sólo por un corto lapso de tiempo, cuando volviera a aparecer alguien “más exitoso” que yo volvería a compararme y sentirme igual de miserable.
Me di cuenta que hacer esto no sólo nos impide lidiar con la emoción, enfrentarla, y lo más importante: CAMBIARLA. Evadir cómo nos sentimos y darle la vuelta a la situación sólo hará que nos conformemos y nos empecemos a rodear sólo de personas que sentimos son “menos” o igual que nosotros para no sentirnos amenazados ¿pero qué aspecto positivo puede haber en conformarnos? Considero que es sano y hasta necesario el siempre tener algo mejor a lo cual aspirar en la vida, es lo que nos sirve de motor, nos empuja a crecer, nos hace querer ser mejores.
Así que, en lugar de aislarte cargando la emoción negativa de la envidia y los celos para seguir en tú pequeño mundo de confort, dale la vuelta y haz de una situación negativa, una situación positiva: mantener a esas personas virtuales o reales a tú alrededor te servirá como recordatorio de lo qué es posible lograr cuando te lo propones, que no debes o puedes conformarte y que siempre hay algo que aprender del éxito de los demás.
Cuando sientas envidia o celos te invito a que cambies tú enfoque de la situación, que no te compares y que en lugar de eso te repitas lo siguiente cada vez que la comparación y la envidia toquen la puerta:
Celebro el éxito de __________, si el/ella ha logrado tener ese (estilo de vida, éxito laboral, dinero, hijos, pareja, etc.) su éxito sólo me confirma que es posible también para mí. Festejo desde ahora todo lo que es posible en mi vida y me emociono anticipadamente por su llegada.
Haz esto cada vez que te compares o sientas envidia/celos y verás cómo tú energía cambia, verás cómo el celebrar el éxito de otros te hará una persona más feliz en lugar de una persona resentida y atraerás todo lo que deseas en tú vida 🙂
Ciria.